Capítulo 19

De vuelta a Scotland Yard me había hecho una coleta porque hacía viento y, además, amenazaba con llover. Los mechones de pelo que quedaban sueltos me molestaban, pero no era tanto como tener todo el cabello suelto por la cara. 20 minutos después en Drace Street, saludé a Peter que seguía en la puerta y fui hacia las escaleras. Cuando vi a Rob le hacia una seña para que fuera hacia la sala donde comíamos, dejó lo que estaba haciendo y vino hacia mí.

Dejé las bolsas sobre la mesa y Rob se quedó mirando las bolsas mientras fruncía el ceño de forma interrogativa, luego me miró como pidiendo una explicación de porqué no había ido al sitio de siempre. Le respondí que hoy libraban y que no ponía el motivo de su día libre, y que un par de minutos después me acordé de un sitio en Dartmouth Street que me habían recomendado y fui hacia allí.

Saqué el contenido de las bolsas, puse su ‘bandeja’ delante suya, la abrió y vio que eran unas albóndigas con patatas, todo en su salsa, la verdad que olía bastante bien. Se le hizo la boca agua y eso que no era lo que él solía comer del sitio de siempre. Saqué también la mía que contenía un poco de merluza en salsa verde y le quité la tapa, también olía de forma muy apetitosa. Le dije a Robert que sacara los cubiertos de un cajón que había y empezamos a comer.

-          Oye, pues no está mal – dijo tras terminarse la primera albóndiga – ahora tenemos otro sitio al que ir cuando queramos variar.

-          También es verdad – admití.

-          Cambiando de tema, ¿sabes que te vas a poner esta tarde? – preguntó y lo miré con cara interrogativa preguntando ¿para qué? – Tenemos que ir al bar de Amber y si vamos con la ropa que llevamos normalmente a un bar de alterne, no nos dejarían entrar.

-          Touché, pues no, no había pensado nada, principalmente porque no me acordaba, ¿Tú ya lo tienes pensado? – pregunté.

-          Había pensado en unos vaqueros y una camiseta y, ponerme un poco de gomina en el pelo para darle volumen – dirigí mi mano hacia el punto donde se encontraban su frente y su pelo, metí mis dedos pelo y se lo levanté.

-          Tienes razón, te da un aspecto más juvenil – reí – ahora que ya sabes que vas a llevar, ayúdame a pensar que me voy a poner esta tarde.

-          Ponte algo de noche y maquillaje, también de noche – reí.

-          Si que te has calentado la cabeza – volví a reir.

-          Ahora mismo no quería pensar – se defendió.

-          No ni ahora ni nunca – le respndí – Ahora enserio, ¿pantalones, vestido o falda? – pregunté – porque tengo el vestido de mi cita con Louis pero lo veo demasiado formal como para un bar de alterne.

-          No lo he visto, pero yo creo que un vestidito un poco putón o una falda alta y una camisa quedaría bien.

-          No es que me hallas ayudado mucho, pero algo me has ayudado. Ahora vamos a recoger un poco todo esto y nos vamos a casa a ver que nos ponemos – asintió y se puso a recoger.

5 minutos después ya estaba toda la basura en la bolsa de la basura y los cubiertos los puse en remojo en la pequeña pila que había a un lado. Salimos juntos, aunque me dejó salir a mí antes. Cogí la carpeta donde se encontraban los documentos que necesitaríamos esta tarde, pensando que ya no pasaríamos por la comisaría y con ellos en la mano fuimos hacia la salida. Rob dijo que se iba andando, quedamos en que a las 6.30pm pasaba a recogerlo en la parada de metro y luego íbamos al bar. Me despedí de Rob y fui hacia mi coche.

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Buenas tardes, quería decir que a lo mejor dejo de subir a blogger, pero seguramente no sea así porque aquí puedo escribir un comentario después de cada capítulo y aún no domino wattpad. Bueno eso, me gustaría, si podeis, que comenteis aquí o en wattpad (http://www.wattpad.com/35179736-sometimes-i-feel-murder) lo que os parece y si podeís hacerle un poco de publicidad por ahí. si quereis que os avise por twitter cuando suba solo teneis que decirmelo en un comentario dejando vuestro user o con un tweet a @swagownsme. Recordad los dos comentarios, en wattpad o blogger. Nada mas por hoy, sed felices xx.

Capítulo 18

En mi mesa, la primera pregunta que se me ocurrió fue la de ‘¿Cómo era su relación con Byron Ryman?’ y a su vez, si había tenido algún conflicto con él. También si le molestó el hecho de que Amber le pusiera los cuernos con Ryman. Y bueno, no se me ocurría, supongo que a raíz de sus respuestas improvisaria un poco y todo eso.

Giré mi muñeca derecha, en la que se encontraba un reloj analógico de color oscuro, que parecía negro, pero no tan oscuro. La manecilla pequeña estaba en el 1 y la grande estaba en la mitad del 9 y el 10, lo que explicaría que ya es hora de comer y que me acabará de rugir la barriga.

Me levante y me dirigí hacia la mesa donde se encontraba Rob.

-          ¿Sabes qué hora es? – le pregunté cuando ya estaba a su lado.

-          No – respondió y me miró como diciendo que le respondiera la pregunta.

-          Es la hora de ir a por la comida – dije - ¿te traigo lo de siempre? – le pregunté.

-          Sí, luego hacemos cuentas – dijo y se puso a mirar otra vez el ordenador.

Me di la vuelta y fui hacia las escaleras. Ya en la planta baja, saludé a Peter que se encontraba en la puerta realizando el clásico control antes de entrar a la comisaría y salí del edificio.

En la calle, saqué un paquete de cigarrillos de mi bolsillo, sé que soy policía y tengo que estar en forma y no perjudicarme los pulmones, pero el estrés en ocasiones me puede y ya llevaba un par de semanas sin fumar. Tendría que hacer como Augustus Waters el protagonista de ‘Bajo La Misma Estrella’, que nunca llegó a fumar solo que era una metáfora. Esta cajetilla tendría por lo menos dos meses, Rob y Maggie (Margaret) me están ayudando a dejarlo y de momento, creo que voy por buen camino. Saqué el mechero y me refugié del ligero viento que había para que el cigarrillo prendiera. En cuanto lo hizo, me lo puse en la boca y aspiré el humo, cuando este llegó a mis pulmones me sentí mucho más relajada.

Con el cigarrillo en la mano derecha y ya habiendo guardado el mechero y la cajetilla, decidí ir andando al sitio de las comidas, puesto que como iba a fumar prefería hacer ejercicio caminando, en vez de ir en coche. Hice el camino de siempre hasta el pequeño restaurante que se encontraba un par de calles más abajo. Cuando llegué a este, la puerta estaba cerrada, había un pequeño cartel que decía que se habían tomado el día libre.

Volví por donde había caminado y entonces me acordé de un sitio que se encontraba en Dartmouth Street, había que caminar más, pero no me preocupé. Ya me había terminado el cigarro y me apetecía otro, pero me dije a mi misma que era más fuerte que fumarme dos cuando intentaba dejarlo, aunque eso tendría que tatuarmelo porque no terminaba de fijarse en mi mente así que, por lo menos, que se fijara en mi piel. Aparté ese pensamiento y me fui hacia Dartmouth street. 20 minutos después llegué al local, que estaba abierto, y pedí la comida de Robert y la mía. Me dijeron que tardarían 20 minutos, por lo que decidí enviarle un mensaje a Rob diciéndole que tardaría más de lo que habíamos supuesto.

Tras el tiempo que me habían dicho, aunque creo que un poco menos, cogí las bolsas con la comida y me dirigí hacia Scotland Yard. 

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Aquí estoy, es un capitulo corto, pero como entenderéis (o eso espero), tercero de la ESO es un curso bastante díficil por lo que no puedo hacer los capítulos muy largos. Tengo unas cuantas cosas que comentar. La novela también la estoy subiendo a Wattpad (http://www.wattpad.com/35179736-sometimes-i-feel-murder) por si quereís seguirla y votar. Como siempre si queréis que os avise por twitter  (https://twitter.com/swagownsme), me dejais el user bajo. A partir de ahora creo que voy a poner una regla, tiene que haber dos comentarios (los mios no cuentan) hasta que suba capítulo, lo que significa que si llega el próximo sábado y tengo que subir, pero no veo dos comentarios, no subo y así.
Por último, decir que 'Sometimes I feel Murder' ya tiene portada, Wiiiiiiiiiii, me la ha hecho una amiga (@niallownsmysoul por si quereis seguirla) y estoy encantada con ella. Aria te quiero mucho. Os dejo la portada y con esto me despido. CHau, hasta la próxima.

Capítulo 17

-          ¿Has encontrado algo? – pregunté a Robert-

-          Nada importante –dijo mirando la pantalla – están las dos limpias, solo han tenido alguna multa por conducir con un nivel de alcohol en la sangre superior al permitido, pero de violencia, no tienen nada.

-          Está bien, ¿quieres saber lo que he encontrado yo? – pregunté a lo que asintió. Le lancé la carpeta marrón claro en la que había guardado los documentos encima de la mesa. La abrió y se puso a mirar los papeles. Los ojos le iban de izquierda a derecha y al llegar al límite de la hoja volvía al principio y así hasta que terminó la hoja y la dobló para ver la siguiente. Así hasta que terminó todas las páginas y cerró la carpeta de nuevo mientras levantaba la vista de esta y la dejaba en la mesa.

-          Parece ser un poco violento ¿no? Podría ser la persona que estamos buscando – dijo, a lo que asentí – cuando venga ya veremos si se pone nervioso o está tranquilo, por su actitud se sabrá.

-          Pensando ahora me he dado cuenta de que como no venga el sábado por la mañana a la comisaría, tendrá que venir el lunes, ¿me equivocó?

-          No, no te equivocas.

-          Está bien. Voy a ir al laboratorio a preguntarle a Margaret si sabe algo sobre Noe, la chica de las cartas – Me despedí de él.

Me dirigí hacia las escaleras para bajar, puesto que el ascensor no me gustaba mucho para bajar, tenía que descender como tres pisos porque los laboratorios estaban en el sótano, por así decirlo. 5 minutos después estaba en la puerta del laboratorio, toqué dos veces en la puerta de este y al oír un ‘Adelante’ de Margaret, entré.

-          Si estas buscando alguna huella o algún resto de ADN en las cartas te diré que no – no me había dejado hablar y ya me había leído la mente.

-          ¿Té queda mucho para tenerlas? – pregunté.

-          No, calculo que mañana por la mañana ya estarán. Tengo que decirte que, la sustancia que no logramos identificar, porque se había mezclado con la insulina que tenía en la sangre,  se trataba de GHB, una droga de la violación, la cual lo dejó un poco ‘grogi’, por lo que al asesino le debió ser más fácil apuñalar a Ryman y luego se desahogó dándole golpes en la cabeza, pero Byron ya estaba muerto.

-          Está bien, gracias, cuando tengas los resultado del ADN del correo de Byron Ryman, nos avisas y bajamos Robert o yo a por ellos.

-          Sin problema.

Salí del laboratorio de vuelta a las escaleras, conforme iba subiendo pensé en que la de las cartas de amor podría ser alguna de las sospechosas, aunque ya hubierámos descartado, entre comillas, a Rebecca Moore, podría ser la que le escribía aquella correspondencia. Aunque a lo mejor, también eran de Avril Moon o de Amber Green. Aunque pensándolo bien, podría haber sido también Aaron, tratando de no ser descubierto. Habría que investigarlo.

Cuando vi a Rob sentado en su mesa, me puse a su altura y enseguida me preguntó:

-          ¿Ha terminado de analizar las cartas?

-          No, todavía no, pero ha averiguado la sustancia que se encontraba en el cuerpo de Byron cuando fue asesinado.

-          ¿Y es….? – Dejó la frase abierta para que la terminara yo, lo que hice.

-          GHB, conocida comúnmente como ‘Droga de la violación’, es la que usan los violadoras para que sus víctimas no estén conscientes a la hora de violarlas. En este caso, lo que le hizo a nuestra víctima, fue dejarlo ‘grogi’ para que no pusiera resistencia al cuchillo que sería su áspid.

-          ¿su áspid? – preguntó Rob.

-          El áspid, fue la serpiente que utilizó Cleopatra para suicidarse, fue como su arma suicidia, pero en este casi fue el asesino quién la utilizó contra Ryman, y fue un cuchillo no un réptil.

-          De acuerdo. Recapitulemos si él no opuso resistencia al arma, ¿Por qué tenía esos golpes en la cabeza?

-          Según Margaret, los golpes eran postmortem, lo que significa que se los hizo el asesino tras Byron haber perdido el pulso.

-          Ok. ¿Te ha dicho cuando tendría las pruebas de ADN? – continuó preguntando.

-          Me ha dicho, que para mañana por la mañana seguramente ya las tenga.

-          Está bien.

-          Voy a ir preparando las preguntas para realizarle a Ronald cuando venga. – Dije y me fui hacia mi mesa.

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Aquí teneis el capitulo 17, no ocurre nada interesante, pero ya sabeis la sustancia que se hallaba en el cuerpo de Byron. Queridas lectoras (si las hay), estoy pensando en dejar esta novela y empezar otra nueva, porque con esta no veo mucho ánimo ni nada de eso. Ya veré lo que hago. Dejando a parte todo eso, podeis votar en la encuesta que hay aquí a la derecha. Desearos feliz año y nos vemos cuando suba capitulo.

No os olvideis de comentar xx